fercaleb

jueves, julio 13, 2006

diez años

Negrita, ojos verdes, te amo. Ya son diez años juntos y algunos más de amor. Estamos locos, corremos de acá para allá, dormimos poco. Negrita, pecosa, sos mi vida. Los chicos no nos dejan dormir, me voy lejos por laburo y estando solo en el hotel, tranquilo, cómodo, no puedo dormir porque me faltás, porque me faltan y sólo quiero el avión que me lleve de vuelta. Negrita, qué fuerza ponés en todo, te amo, te admiro, me hacés feliz. Estoy loco, me siento cargado con una mochila de adoquines, con sogas en las manos y en los pies, arrastrando piedras, pero sigo mirando el cielo, buscando constelaciones, y vos siempre mirando el horizonte... paremos, Negrita. Paremos un ratito nada más, mirame a los ojos, clavame esos dos solazos verdes, feliz aniversario, Negrita, mi Amor.

viernes, julio 07, 2006

El desafío

Este no es el lugar donde todo fue creado, es otro lugar. Otros lugares también fueron creados que no son donde todo fue creado y de uno de esos lugares cruzando el mar vinieron a desafiar a los hombres. Pero los hombres no aceptaron y se fueron de noche. Se fueron con sus mujeres y sus niños y llevaron también sus animales. Y cuando llegó el día se vio que los hombres se habían ido y llevado a sus mujeres y sus niños y sus animales. Y los que vinieron del otro lugar fueron a buscarlos por toda la tierra hasta llegar al otro mar donde se oculta el Sol. Buscaban durante el día en las selvas, las playas, las montañas, las praderas, pero de noche encendías fogatas y no dormían, se quedaban junto a las fogatas y no miraban la oscuridad. Hasta que tuvieron que dormir y dormían de día porque temían la noche y de noche se quedaban junto a las fogatas. Pero los sacerdotes de los hombres no veían en esos tiempos los tiempos que vendrían, sólo veían los tiempos que pasaron y así es como sabían que había otros lugares que habían sido creados pero no sabían que vendrían a desafiarlos. Y sabían que se había creado el lugar donde no podían encontrarlos pero no sabían si vencerían y esperaron el momento. Y los que vinieron del mar no dormían en las noches y de día se turnaban para dormir y los hombres mataron primero a los que estaban dormidos y cuando llegaron los que habían ido a buscarlos lucharon y los hombres vencieron pero murieron muchos y esos son los hombres de los que venimos los que vivimos ahora en este lugar.

A propósito:

I.-

Si están o no habitados Marte, Venus y Júpiter,
es una duda torpe que no has de mantener.
Este globo terráqueo (planeta nada ilustre)
se vanagloria, empero, de muchos habitantes:

¿Por qué no los tendrían, Elbiamor, los demás?
¿Que les falta una atmósfera de oxígeno?
Respirarán fotones o electrones...

¿Que no tienen ganados ni trigales?
Almorzarán sus cobres y amatistas...

Sus almas racionales bien podrían tener
un soporte de cuarzo, sin violentar la lógica.

¿Por qué han de ser iguales a nosotros?
La posibilidad es infinita
y el Divino Alfarero no se repite nunca...

(Leopoldo Marechal)

II.-

"-Tu nuera y los nietos te extrañarán -iba diciéndole-. Te mirarán a la cara y creerán que no eres tú. Se les afigurará que te ha comido el coyote cuando te vean con esa cara tan llena de boquetes por tanto tiro de gracia como te dieron".

(Juan Rulfo).

III.-

Beberemos en el cráneo del traidor
Con sus dientes haremos un collar
Con su piel haremos un tambor
De sus huesos haremos flautas
Y después bailaremos.

(Poesía quechua)